Mariano José de Larra, Carta a Andrés, 1832
Hay que reconocer que Larra tenía talento para el naming. No me digáis que «Maldito Gutenberg» no sería un nombre genial para un grupo indie.
Bromas aparte, la sátira del genial Larra pone en evidencia, una vez más, la importancia de la invención de la imprenta y su influencia capital en el curso de la historia. Nada fue ya igual después de Johannes Gutenberg.
Se cumplen ahora 550 años de la muerte del genio de Maguncia y a lo largo de este 2018 se vienen celebrando distintos eventos para conmemorar la efeméride. Así, durante los meses de febrero, mayo y junio se celebraron diversos actos en Barcelona, y ahora, este octubre que recién arranca, el homenaje se traslada a Madrid, donde tendrán lugar conferencias, talleres, mesas redondas, proyecciones cinematográficas, visitas a exposiciones y a bibliotecas para celebrar la vida y obra del hombre que con su invento cambió el curso de la Historia.
Gutenberg 2018 estará presente en la Escuela Superior de Diseño, en las Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid, en la Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla, por supuesto, en la Imprenta Municipal y, cómo no, en el taller de la Familia Plómez.
Entre los distintos participantes en las jornadas encontramos a destacadas personalidades relacionadas con la tipografía como Andreu Balius, Diego Areso, María Ramos, José Ramón Penela, Simon Loxley, Christopher Burke, Juanjo López, Ana Estrada, Manuel Sesma, Albert Corbeto o José María Ribagorda, por citar a alguno de ellos.
Estamos en deuda con Gutenberg, cinco siglos después, su diabólica invención nos sigue proporcionando alegrías y aún es fuente de belleza y reflexión. Gutenberg nos hizo mejores.