María Carmona. Fotógrafa: Cecilia Díaz Betz.
Diseñadoras. (Re)diseñando el mundo es el título de un catálogo de exposición que da visibilidad al trabajo de diseñadoras excelentísimas. En esta ocasión, hemos tenido el gustazo de charlar con María Carmona, diseñadora gráfica, directora de arte y artista multidisciplinar, quien ha estado a cargo de su diseño. Marzo se caracteriza por tener en uno de sus días una de las fechas más señaladas del calendario: el Día Internacional de la Mujer (8M). Desde Rayitas Azules, como bien sabéis, uno de nuestros principales cometidos es aportar continua visibilidad y reconocimiento al trabajo de mujeres pertenecientes al sector tipográfico y editorial. Sigue leyendo y no te pierdas esta maravillosa entrevista.
Conociendo a María y sus proyectos
Rayitas Azules: En primer lugar, nos gustaría conocerte un poquito más, María. Cuéntanos sobre ti, tus orígenes en el mundo del diseño y la dirección de arte.
María Carmona: Estudié arquitectura en Madrid, siguiendo los pasos de mi madre, que era delineante. Aunque la arquitectura tiene una carga técnica importante, es una disciplina que abre mucho la mente y enseña a pensar desde distintos ángulos. Siempre me interesó especialmente la comunicación visual y la dimensión gráfica y compositiva de los proyectos. Poco a poco, fui recibiendo más encargos que se alejaban de la arquitectura y me acercaban al diseño en un sentido multidisciplinar (editorial, set design, gráfica, etc.). Desde entonces, llevo más de 15 años trabajando como diseñadora.
RA: Cuéntanos acerca de tu estudio, el flujo de trabajo que lleváis a cabo. ¿Cuáles son los valores o principios que siempre intentas aplicar en tu trabajo como diseñadora gráfica y directora de arte?
MC: Me involucro en todas las fases del proyecto, desde la conceptualización hasta la gestión y la producción cuando es necesario, así que el flujo de trabajo suele ser intenso, con varios proyectos solapados en diferentes etapas. Suele ocurrir que las fases se complementan muy bien en cuanto a demanda de creatividad, y con una buena organización, todo sale adelante.
A veces trabajo sola, otras en equipo con otras diseñadoras y, en ocasiones, subcontrato algunas partes más específicas del trabajo. Comparto oficina con profesionales de diseño, arquitectura y otras disciplinas, y hemos conseguido generar un entorno y un espacio de trabajo muy familiar, al que hemos llamado Belafonte.
Belafonte, el espacio de trabajo de María.
RA: ¿Hay algún proyecto al que le tengas cariño especial? Si es así, háblanos de él.
MC: Hay proyectos de los últimos años a los que sigo volviendo con cariño. Destacaría las siguientes áreas:
En primer lugar, la área de identidad de marca, como Placeō (marca de café de especialidad), La Jolie (compañía de teatro formada por mujeres) o TRANS (proyecto de investigación de la Escuela de Arquitectura): los tres han sido trabajos con mucha libertad creativa y una gran sintonía con los clientes, lo que siempre lleva a resultados muy satisfactorios.
Proyecto Trans (proyecto de investigación de la Escuela de Arquitectura)
En segundo lugar, proyectos con impacto social, como campañas de concienciación sobre el sinhogarismo o la reciente campaña de arrollada con Lucía Boiani, #TaxTheSuperRich con Oxfam.
Proyecto #TaxTheSuperRich, con Oxfam.
Destaco también colaboraciones con instituciones culturales, como Voltea, desarrollado con Boom para la Fundación Mapfre o este libro con el Instituto Cervantes.
Finalmente, intervenciones espaciales, como una zona de juego en Conde Duque o Corner para Dunkers de Footlocker.
RA: Sabemos que la inspiración y los referentes son una pieza clave en el flujo de trabajo de un diseñador/a. ¿Qué referencias o influencias han marcado tu estilo y tu forma de trabajar a lo largo de tu carrera?
MC: Al inicio me influenciaron mucho Valée Duhamel, por su uso del color y la composición, y por su capacidad para crear magia. Pero sobretodo por compartir los making of de cada proyecto: eso me abrió un nuevo mundo de posibilidades. También me han marcado diseñadoras como Verònica Fuerte (Hey Studio), Rebeka Arce, Marta Cerdà, Yarza Twins, Anna Kulachek, Leta Sobierajskiy o estudios como Fagerstrom, Koln Studio o Relajaelcoco. Me seduce también mucho el trabajo de personas como Javier Jaén o Isidro Ferrer, por la plasticidad y la magia visual. O Wes Anderson o Lernert and Sander en el ámbito más audiovisual.
A lo largo de los años, he descubierto que las referencias se vuelven más significativas cuando conoces a las personas detrás de ellas.
RA: Muchos de nuestros lectores/as son diseñadores gráficos/editoriales en ciernes e incluso dirección de arte, ¿qué consejo les darías?
MC: Me genera cierto recelo dar consejos, porque a menudo se formulan desde una posición de privilegio. Pero hay aprendizajes en mi carrera que pueden resonar en otras personas.
- No compararse.
- Recordar que en casi todos los proyectos (sean más o menos interesantes) se aprende algo valioso.
- Sacar tiempo para proyectos personales. Esos proyectos permiten explorar disciplinas o formas de trabajo que realmente interesan.
RA: Son consejos que estamos segurísimos que pueden venir muy bien para todos aquellos que nos leen cada semana. Es importantísimo dedicar tiempo a proyectos que sacien nuestras inquietudes y que nos nutran a la hora de continuar creando.
Diseñadoras. (Re)diseñando el mundo.
RA: Ahora, pasemos al proyecto Diseñadoras. (Re)diseñando el mundo. ¿Cuáles son los orígenes del proyecto? ¿Con qué propósito nace este libro?
MC: El libro es el catálogo de una exposición itinerante del Instituto Cervantes, comisariada por Gloria Ruiz, compañera en el proyecto FIDO. Es una recopilación excepcional de diseñadoras que conforman un panorama nacional muy vibrante y diverso en cuanto al trabajo que desarrollan. Mi rol ha sido diseñar la identidad de la exposición, su implantación en las distintas itinerancias y el catálogo. Ha sido un trabajo meticuloso, donde hemos cuidado cada detalle con mucho mimo.
Catálogo de exposición Diseñadoras. (Re)diseñando el mundo.
RA: Nos gustaría conocer cuáles han sido los retos o desafíos que has abordado a la hora de realizarlo.
MC: El principal reto era diseñar un libro que tuviera una estructura gráfica con suficiente carácter y personalidad para ser reconocible, sin restarle protagonismo a las obras de las diseñadoras.
RA: Y, ¿cómo enfocaste la identidad gráfica del libro? ¿Cuáles fueron tus referentes?
MC: La identidad del libro y la exposición debía representar el equilibrio entre diseñadoras con estilos, metodologías e intereses muy distintos, que sin embargo conforman un conjunto sólido.
Catálogo de exposición Diseñadoras. (Re)diseñando el mundo.
Por eso, en el diseño del título las letras se desplazan, giran y se mueven, pero a la vez se apoyan unas en otras. Además, diseñamos una banderola específica para cada diseñadora, que servía de portadilla en el catálogo y abría su espacio en la exposición.
Portadilla del catálogo de exposición Diseñadoras. (Re)diseñando el mundo.
RA: En este trabajo apreciamos la importancia de tener un concepto sólido que sustente todas las decisiones de nivel editorial y tipográfico. Por otro lado, te queremos preguntar acerca de una fase extremadamente importante en cualquier proyecto editorial, el proceso de producción. ¿Cómo fue? ¿Cómo gestionas las tomas de decisiones sobre papeles, impresión o acabados especiales?
MC: Durante el diseño del libro, recibí asesoramiento de una persona especialista en papeles que trabajaba en Fedrigoni, que me ayudó a seleccionar el papel adecuado para los acabados que queríamos lograr. La paleta de color la definimos tras muchas pruebas en el estudio, combinando colores en la cubierta y las guardas, y eligiendo cintas de algodón para marcar las páginas. La portada, sin tinta y con golpe seco, fue una decisión consensuada desde el principio. La imprenta, Gráficas Palermo, nos guió en los detalles técnicos y el resultado final fue exactamente lo que esperábamos.
Catálogo de exposición Diseñadoras. (Re)diseñando el mundo.
RA: Para finalizar, aunque cada vez hay más visibilidad hacia el trabajo de diseñadoras y profesionales del sector, ¿qué cambios crees que aún hacen falta para lograr una industria del diseño más equitativa entre hombres y mujeres?
MC: En FIDO llevamos años investigando las desigualdades de género en el diseño. Hay muchas diferencias cuantificables en cifras y porcentajes, pero también aspectos más sutiles que han condicionado la carrera de muchas mujeres, como la falta de visibilidad o la inseguridad profesional. Aunque estamos viendo avances y una mayor equidad, aún queda trabajo por hacer en áreas como la inclusión (más allá del género), la representación y la autoconfianza dentro del sector.
RA: No podemos estar más de acuerdo contigo, María. No cabe duda de que hemos avanzado notablemente en un montón de aspectos, pero eso no quita que aún no quede trabajo por hacer en muchos otros. Muchísimas gracias por habernos dedicado este ratito para conocerte más y mostrar el excelente trabajazo de Diseñadoras. (Re)diseñando el mundo.